Darse un baño o una ducha caliente es uno de los rituales diarios más arraigados entre los españoles, pero su eficiencia y sostenibilidad dejan mucho que desear. Para mejorar el aprovechamiento energético, cada vez más consumidores apuestan por los calentadores estancos, aparatos capaces de producir ACS a través de la combustión de gas natural o butano. Es una tecnología segura que cuenta con el respaldo de fabricantes reputados. En caso de avería, por ejemplo, cointra servicio técnico Vilagarcía se ocupa de realizar una revisión o mantenimiento completa, con una periodicidad de dos años.
Frente a los termos eléctricos y otras soluciones tradicionales, los calentadores estancos calientan el agua con mayor rapidez y proporcionan una temperatura más estable. Su funcionamiento es, en esencia, muy similar: unos fogones internos calientan una serie de tubos por los que circula el agua y que elevan su temperatura en el proceso.
Pero los calentadores así diseñados se distinguen por el uso de gas para alimentar la combustión y la captación de aire no del interior del edificio, sino del exterior mediante un ventilador o similar, generando una cantidad mínima de residuos que son convenientemente evacuados. Por eso se denominan «estancos», a diferencia de los calentadores de tipo atmosférico, que obtienen su oxígeno de la propia vivienda.
Entre sus beneficios, sobresale su capacidad para reducir las emisiones de dióxido de carbono y óxido de nitrógeno. Al reemplazar los antiguos termos domésticos por calentadores estancos, aporta un grano de arena al cuidado del medio ambiente.
Atendiendo a la seguridad en el hogar, este tipo de calentadores disminuyen el riesgo de fugas tóxicas, dado que la toma y emisión de gases se efectúa por conductos separados. Dada la modernidad de estos aparatos, su uso es más sencillo y fácil de ajustar al gusto de cada usuario, incorporando una app móvil que permite gestionarla a distancia.
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